Mi admisión en el Seminario Interno

Ayuntamiento y Catedral de Teruel

[...] Viernes, 15 de junio de 2012 [...] A finales del mes de mayo, me dirigías una carta, escrita de tu puño y letra, en la que solicitas ingresar en el Seminario Interno el próximo curso 2012-2013 [...] El Visitador y su Consejo, acceden gustosos a tu petición. [...]

¡Así es! Después de cinco años en la Etapa Previa (llamado postulantado cuando empecé), después de vivir un curso en la comunidad de San Gonzalo (Triana - Sevilla), tres en la comunidad de San Matías (Hortaleza - Madrid), y este último en la CIFI (Santa Marta de Tormes - Salamanca), sentí que ya era el momento, y escribí mi solicitud. El pasado 13 de junio se reunió el Visitador y su Consejo y ayer me contestaron.

No tengo palabras para describir lo que siento, porque, sinceramente, aún no me he hecho a la idea. Lo de ir a Teruel y todo eso sí, porque los indicadores apuntaban a ello, pero la admisión en el Seminario Interno... Esto significa que el curso que viene (en torno a la fiesta de san Vicente) ya seré de la Congregación de la Misión, que aunque así lo sienta actualmente, es un sentimiento incompleto.

Esta pertenencia parcial (aún me falta incorporarme, que tendrá lugar con los votos), conlleva una gran responsabilidad, entre todas, mi Visitador me indica algunas, y entre ellas, destaco la que más peso tiene actualmente:

[...] Hay algo en lo que tienes que poner un interés, un esfuerzo de sobresaliente: los estudios que se exigen para ser un sacerdote bien formado y un gran Misionero [...]

Actualmente es la cruz que debo llevar sobre mi espalda, aquello que siempre quise hacer cuando era pequeño, aquello que abandoné cuando no tuve fuerzas, y aquello que retomé cuando sentí que Cristo me llamaba a seguirle de una forma distinta, los libros, la universidad, ¡ojalá hubiera aprendido a estudiar en su momento!, ¡que trabajo cuesta ahora!

El Seminario Interno, para quien no lo sepa es un año (12 meses) en el que haré una pausa académica, para poder dedicar el tiempo a aprender, estudiar, asimilar y vivir la historia de la Congregación y de san Vicente, las Constituciones, Reglas Comunes y Estatutos, y un largo etcétera, todo lo necesario. Además tendré experiencias pastorales, y seguramente Misiones Populares, y otras tantas cosas. Como se viene llevando a cabo desde hace dos Seminarios Internos, compartiré la experiencia con futuros misioneros de otras procedencias de Europa (Albania, Nápoles y Rumanía) además claro, de los españoles. De mi comunidad me acompaña Isaac, al que conozco desde hace varios años (JMV), y con el que comparto comunidad desde este año.

Os pido que recéis por mí (y por los que me acompañan), para que esta experiencia, a parte de ayudarme a crecer, me sirva de cambio radical, de cambio de batería para afrontar el camino que aún me queda por andar. Yo, siempre, os tengo  y os tendré presente en mis oraciones.

Israel Jesús